Antes de que suene la alarma mi sueño se trataba de una charla entre viejas brujas, así lo describiría yo. Estaba con las chicas del secundario, con las que fui al viaje de egresados y jamás volvimos a hablar (justamente ayer, depurando mis amistades de facebook borré un par). Estábamos charlando y tomando mates, mientras una confesaba que tuvo algo con Nico (compañero de mi primaria que pasó a ser compañero de secundaria de ellas que iban a la mañana). Decía, por lo poco que recuerdo, que en una peli de Goku es que pasó algo ¿? Y que él confundió a la chica de esa vez con otra y se la chapó también, o algo así; como involucrando a dos de las chicas de esa charla.
Un poco antes en el mismo escenario confuso estaba la mamá de mi alumno (9 años) del año pasado con mi alumno, claro. Y ella me charlaba de la crianza y de cómo le enseñó en este tiempo de cuarentena, no tengo más detalles de esta parte salvo la imagen de esa parte de mi sueño.
Antes de eso, recuerdo la pieza de mi abuela (en la que estoy durmiendo en esta cuarentena) en dónde estaba mi abuela, mi hnita Zoe y yo. Zoe se había tatuado una pija gorda en la muñeca y lo mostraba entusiasmada y orgullosa. Mi mamá le dió permiso y me contaba que fue así a la escuela. Mi abuela y yo tuvimos una charla pero no recuerdo bien de qué se trataba, si recuerdo que le mencioné cómo pasar un jabón por una máquina en el súper para después pagarlo...
Lo cual me traslada a la primer parte del sueño en la que estaba en un super con mi mamá, mi papá, Gio (mi sobrino) y creo que mi hna (mamá de Gio) también. Recuerdo menos de esta parte, las góndolas si, un supermercado enorme y mis viejos haciendo las compras. Había una máquina que no sabíamos cómo usar. Solo sabíamos que si acercábamos la mano la máquina andaba sola y hacía un movimiento como de aplastar algo. Yo descubrí el sentido de su existencia al agarrar un jabón tocador, sacarle la envoltura y acercarlo a la máquina para que lo selle y así, poder pasar por caja a pagarlo. Era una máquina blanca, hecha de tergopol y no recuerdo más sinceramente.